Hablamos de huertos, de formas para cultivar y un sinfín de consejos útiles para cuidar tus plantas favoritas. Sin embargo, ¿Has pensado qué tipo de semillas son las más adecuadas?, es más, ¿Conoces las diferencias entre semillas híbridas, ecológicas y transgénicas?
Puede que ya tengas tus plantas echando raíces o puede que estés planteándote la posibilidad de arrancar con un nuevo huerto, ya sea en la terraza de tu piso o en pleno campo. Pero, sea como fuere, debes conocer las principales características de estas tres familias de semillas.
Hoy vamos a realizar un pequeño recorrido por todas estas clases, para que sepas cuáles son sus principales diferencias y qué tipo de cuidados, así como propiedades, poseen cada una de ellas. Y sí, las semillas ecológicas son las favoritas, ¿Quieres saber por qué?
¿Qué son las semillas híbridas?
Empezamos nuestro recorrido por las semillas híbridas, aquellas que se han originado a causa de una polinización entre dos especies de plantas parecidas. Hay ocasiones en las que sucede de forma natural, gracias a polinizadores naturales como las abejas. Sin embargo, el ser humano también puede propiciar esta generación de semillas.
No son nuevas, llevan generándose adrede desde comienzos del siglo XX, donde la industria semillera encontró un auténtico filón gracias a las ventajas que proporcionan, dando lugar a frutos más resistentes y de calidad que su planta antecesora.
Aunque a día de hoy todavía son empleadas dentro del sector agrícola, las semillas híbridas no son las más indicadas si quieres comenzar a plantar en tu huerto, ya que con ellas la segunda generación de semillas no suele desarrollarse como es debido o directamente no darán el fruto esperado.
El poder de las semillas transgénicas
A pesar de seguir contando con un rechazo por una parte de la sociedad, las semillas transgénicas han logrado posicionarse como el elemento clave en la industria agroalimentaria, ya que sus propiedades han sido alteradas genéticamente desde un laboratorio a fin de facilitar su cultivo y cosecha.
Se introducen genes de otras especies, se modifican o incluso se extraen aquellos que no se desea mantener. Todo es válido para dar lugar a una semilla más resistente a las plagas, efectiva para cultivos en masa y con resultados superiores en cuanto a la cantidad de frutos obtenidos de ella.
Sin embargo, esta ingeniería genética aplicada a las semillas sigue estando en el punto de mira por parte de la sociedad, ya que todavía no existen resultados concluyentes sobre si son perjudiciales o no para la salud de quienes las consumimos. Además, debes saber que con éstas tampoco tendrás semillas de segunda generación ya que la mayoría son estériles.
Semillas ecológicas, las naturales
Y decimos las de siempre porque al final, pase lo que pase, son las que permanecerán contigo y podrás reproducirlas las veces que quieras. Las semillas ecológicas son aquellas que proceden de plantas que no han sido alteradas por el hombre.
Y cuando decimos el hombre incluimos a la ciencia y sus métodos. En este caso, se trata de semillas procedentes de plantas que no han precisado de abonos ni fertilizantes químicos, donde el propio curso de la naturaleza y sus elementos naturales han seguido su camino sin alteraciones de ninguna clase.
Con ellas sí que podrás recoger nuevas generaciones de semillas que también podrás plantar, y así sucesivamente. Ahora bien, recuerda que estas son las más indicadas para tu huerto, sin embargo, por muy ecológicas que sean no servirá para nada si después aplicas sobre ellas cualquier producto químico.
Para poder distinguirlas debes asegurarte de comprobar que cuentan con el certificado de control que acredita que proceden de una agricultura completamente ecológica. Son naturales y con ellas obtendrás los mejores resultados en tus futuros cultivos.
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